Mejor comprensión de los cosméticos ecológicos
¿Le interesa este blog? Es, a priori, que usted considera muy importante la certificación BIO de los productos cosméticos. Es una buena noticia, ¡nosotros también! Tanto es así, que hemos pensado hacer este post en varias partes para tratar el tema adecuadamente.
No siempre es fácil entender la diferencia entre los cosméticos convencionales, los naturales y los orgánicos certificados. Al intercambiar con la comunidad de Poulettes, nos hemos dado cuenta de ello.
Todo el mundo habla de la Belleza Verde. Los principios activos naturales están más que nunca en el punto de mira. Las controversias sobre los conservantes son un tema bien conocido por el público en general...
Y, sin embargo, lo BIO sigue siendo una categoría bastante confidencial en el mundo de la higiene y la belleza. Hasta la fecha, los cosméticos ecológicos sólo representan el 5% de las ventas totales de cosméticos.
Por lo tanto, forma parte de unselecto club de consumidores (todavía minoritario, pero exigente y comprometido). Y se lo agradecemos.
Algunos conceptos normativos:
En Europa, los productos cosméticos deben cumplir el Reglamento del Parlamento Europeo y del Consejo de 30 de noviembre de 2009 (y sus diversas modificaciones).
La normativa sobre productos cosméticos se está adaptando a la evolución de nuestros conocimientos en el ámbito de la salud y a nuestras opciones éticas y medioambientales.
La prohibición de los ensayos con animales en Europa es, por ejemplo, bastante reciente si se piensa en ello: 2013. Y la de ciertos parabenos (como el isobutil o el fenilparabeno) solo data de 2014. La metilisotiazolinona (MIT), un conservante que ha provocado muchos casos de eczema alérgico crónico, desapareció de la composición de los productos leave-on en 2017. En cuanto al D5 (también conocido como ciclopentasiloxano), es una silicona que combina la condición de disruptor endocrino con la característica de ser bioacumulable (boo). Por tanto, no es biodegradable y daña los océanos. Se prohibió en enero de este año 2020. Los peces están contentos y nosotros también.
Hay que tener en cuenta que Europa tiene una lista de 1.300 ingredientes prohibidos. Mientras que en Estados Unidos sólo hay... 30. Así que, después de todo, no estamos tan mal a este lado del Atlántico.
Sin embargo, lo que está en juego es su cuerpo. Así que tiene derecho a exigir la máxima seguridad a sus productos. Según Poulette, la actitud de "hay que sufrir para ser bella" está totalmente desfasada.
El principio de precaución de la BIO: nunca es demasiado cuidadoso
Sin embargo, la legislación europea sigue autorizando muchos ingredientes considerados indeseables por diversas organizaciones y asociaciones de consumidores. Este es el caso, en particular, de muchos conservantes considerados como potenciales disruptores endocrinos. Esto cambiará sin duda, pero mientras tanto, para no correr riesgos, es una buena idea recurrir a los productos ecológicos.
De hecho, las etiquetas ecológicas que certifican nuestros productos (Ecocert y Cosmos Organic) defienden el principio de precaución.
Imponen a las marcas ecológicas certificadas, como Les Poulettes Paris, normas mucho más estrictas que la normativa vigente y, por tanto, prohíben los siguientes ingredientes o familias de ingredientes:
Pero, ¿por qué las marcas no ecológicas siguen utilizando ingredientes controvertidos?
Se podría preguntar: si estas sustancias son potencialmente peligrosas o contaminantes, ¿por qué no se obligan todas las marcas a evitarlas, independientemente de la etiqueta ecológica?
Muy buena pregunta.
Una de las razones es que es difícil formular un sistema de conservación eficaz utilizando sólo una gama limitada de conservantes aprobados por la BIO. Además, estas materias primas son más caras.
Por ejemplo, en los cosméticos convencionales, una buena dosis de fenoxietanol (fácil de producir, barato y radical contra muchas bacterias) y casi está hecho.
Tenga en cuenta:
El etanol (el alcohol básico, el mismo de sus cócteles favoritos) está autorizado en la agricultura ecológica. No es peligroso, ni tóxico, ni contaminante, pero en Les Poulettes Paris lo consideramos potencialmente resecante para la piel, por lo que también lo prohibimos en las fórmulas de nuestras mascarillas certificadas BIO y Made in France. Para el aperitivo, sin embargo, ¡no decimos que no!
Cuidado ecológico certificado, Made in France
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